Para determinar si una hélice requiere una revisión de su diseño, es necesario verificar el desempeño de la embarcación, como también el funcionamiento de los componentes de instalación del sistema de propulsión.



COMPONENTES DE INSTALACIÓN DEL SISTEMA DE PROPULSIÓN
Constituyen el 50% de los casos cuando los motores no dan la potencia esperada. Esto puede ocurrir porque no existe la adecuada ventilación de la sala de máquinas o de su admisión; el circuito de descarga de gases de escape no es el adecuado o simplemente el silenciador puede estar obstruido o con exceso de restricciones.

En otros casos, pero con mucho menos probabilidad, se presenta que el sistema de enfriamiento esté defectuoso; esto puede ser porque al realizar la reparación integral no se ha realizado la des-carbonización completa o porque los impulsores de las bombas están desgastados o haya aire en la toma de mar o se encuentre obstruida.

ALINEAMIENTO DE LÍNEAS DE PROPULSIÓN
El alineamiento afecta el desempeño del sistema de propulsión porque estando todo el sistema bien configurado, el exceso de temperatura en los descansos o rodamientos no permite operar el sistema adecuadamente. Otra causa que puede presentar calentamiento en los descansos o rodamientos es el exceso de deformaciones del casco que afecta el alineamiento de la línea propulsora.

RELACIÓN DE REDUCCIÓN
Se encuentra con mucha frecuencia que al diseñar una hélice nueva o por una re-motorización, no se tenga la información confiable de la relación de reducción, generando en algunos casos sobrecarga o simplemente que la hélice quede ligera.

CORRIENTES PARÁSITAS O CORROSIÓN ELECTROLÍTICA
Un sistema de propulsión debe tener bien aterrizado el sistema eléctrico, manteniendo las valencias electroquímicas, de tal manera de que la hélice no sufra desgastes prematuros que disminuyan el desempeño. Otro efecto posible es la mala distribución de ánodos de protección galvánica, que causan el mismo efecto de desgaste prematuro o el doblez de las puntas de las aspas. En las barcazas, por tener el fondo plano, se puede observar incluso que es importante tener el claro de la hélice suficiente para no generar desgaste por corrosión en las puntas.

HÉLICES CON POBRE DESEMPEÑO
Ante una sospecha de que la hélice está teniendo un pobre desempeño, se recomienda medir el consumo de combustible y compararlo con la curva de consumo propuesta por el fabricante. Es usual que la hélice genere una variación de su consumo en un rango de +-10% de la indicada por el fabricante, por la variación en las condiciones de carga. Si se demuestra que existe una variación mayor, es recomendable revisar el diseño de la hélice. En forma complementaria se pueden revisar los siguientes parámetros que pueden ayudar a confirmar la sospecha de que una hélice debe ser re-diseñada:

• Comparación de velocidad entre barcos de similares dimensiones y potencias.
• El motor no alcanza las RPM de trabajo y presenta evidencias de sobre-carga (calentamiento, humo negro, etc.).
• El motor presenta evidencias de una condición ligera.
• Al operar la nave, se presenta un golpeteo y/o zumbido en el área del codaste.
• La cantidad de incrustaciones en las superficies sumergidas.